El magnate dueño de Maroil Trading Inc., Wilmer Ruperti, afirmó que hay 1 millón de barriles de gasolina más camino a Venezuela.
En entrevista para la agencia de noticias AP, Wilmer Ruperti aseguró que esto lo hace por miedo a que la escasez de combustible empeore la situación del país y que provoque entonces una implosión social.
«No se trata de mi negocio. Se trata de ayudar al pueblo venezolano, que sufre las consecuencias de una serie de acciones políticas», expresó el magnate, quien precisó que la semana pasada llegaron 300.000 barriles de gasolina a Venezuela.
Para traer este combustible, Wilmer Ruperti adquiere la gasolina de la mayoría de las empresas que se niegan a venderla al régimen de Nicolás Maduro, el cual se encuentra fuertemente sancionado.
Rechazó que se le acuse de querer enviar un salvavidas a Maduro, pues considera esta labor un «trabajo humanitario» para aliviar el sufrimiento de los venezolanos.
«Maduro es el presidente de Venezuela, no puede haber duda al respecto. Pero esto va más allá del presidente. Al final del día, estás ayudando al pueblo venezolano, gente común que va a trabajar todos los días y depende del transporte para llegar a sus trabajos», expresó.
Redacción de Monitor Dolar con información de el nacional.