Netflix ha comenzado el año manteniendo su apuesta por la ficción pero también con el objetivo de abrir su catálogo a contenidos y géneros que todavía no había explorado en profundidad. La plataforma de streaming estrenó el 1 de enero ‘The Circle’, un reality show de encierro al más puro estilo ‘Gran Hermano’, pero con una vuelta de tuerca para acercarse a la realidad influencer que no existía cuando el formato de John de Mol nació en 1999.
Esta es la primera vez que la plataforma de streaming aísla a un grupo de personas en un concurso, ya que hasta ahora se había inclinando por programas más próximos al factual, como ‘Queer Eye’ o ‘Back with the ex’, y a competiciones como ‘Nailed It!’. Se trata de un giro en la estrategia de Netflix que también se refleja en su modo de emisión, ya que las doce entregas que conforman la primera edición de ‘The Circle’ en Estados Unidos se ofrecerán a lo largo de tres semanas.
En realidad, el nuevo reality de Netflix es la adaptación del formato británico del mismo nombre que Channel 4 emite desde 2018. Tomando ingredientes de ‘Catfish’, ‘Black Mirror’ y el mencionado ‘GH’, nació cuando su creador, Tim Harcourt, se preguntó cómo sería un reality en el que los participantes nunca estuvieran cara a cara. La fórmula ha gustado tanto a la plataforma que en este 2020 planea estrenar sendas versiones en Brasil y Francia, fruto de su acuerdo con All3Media.
Ver las diferentes entregas del programa es verse a uno mismo abriéndole privado a un desconocido en Instagram, pero sobre todo recordar aquellos tiempos en los que nacía Internet y todavía aprendíamos a navegar entre chats y foros intentando controlar la información que dábamos de nosotros. Paradójicamente, ‘The Circle’, un espacio que no se habría podido producir antes, remite a ese momento naif de nuestras vidas.
Con redacción de MonitorDolar e información de La Vanguardia